No hay nada más lindo que toquetear los cesos de una vaca.
Y si tenés mucho stress encima, conseguite un riñoncito (siempre vacuno, claro, todavía no soy asesina) y apretalo bien fuerte imaginando que es la cabeza de alguien que no aguantas (o alguna otra cosa más "fuerte") para descargar tensiones. TE LO RECOMIENDO!
Me voy a dormir, con una congestión que parece que estoy hablando adentro de un frasco.
Chau bloggers ♥
No hay comentarios:
Publicar un comentario